Consejos para el tratamiento de la menopausia
¿Cómo se tratan los síntomas y riesgos principales de la menopausia como sofocos, la osteoporosis y un mayor riesgo cardiovascular?
El tratamiento de la menopausia es un problema que consultas con frecuencia a tu ginecólogo. Las mujeres están cada vez más concienciadas con los temas de salud y, sobre todo, en mejorar tu calidad de vida. De ello te voy a hablar hoy.
¿Cuáles son los principales riesgos de la menopausia?
Si ya estás en menopausia no es necesario que te hable de los síntomas más frecuentes, son manifiestos. Pero si estás próxima a tenerla es el momento de cambiar tus hábitos de vida.
Los sofocos, el insomnio, la sequedad vaginal, cambios de humor, etc son bien conocidos. Pero hoy te hablo de los riesgos mayores, algunos de ellos menos conocidos.
Los principales riesgos mayores son la osteoporosis y el riesgo cardiovascular.
Con el paso de los años, y con la falta de hormonas tras la menopausia, el hueso se va descalcificando y perdiendo resistencia. Puedes perder hasta un 25 % de tu hueso, y se traduce en un mayor riesgo de fractura (de cadera y de columna vertebral).
Las mujeres tienen dos hormonas principales: los estrógenos y la progesterona. La falta de estrógenos tras la menopausia favorece el aumento de tus niveles de colesterol y cambios en las paredes de los vasos sanguíneos. El resultado es un mayor riesgo de alteraciones cardiovasculares y de infarto de corazón.
¿Qué tratamiento de la menopausia es aconsejable?
- Vida sana
- Isoflavonas (de soja)
- Tratamiento hormonal
Estos son los tres pilares básicos en el tratamiento de la menopausia. No todas las mujeres tienen los mismos síntomas al quedarse sin hormonas, ni todas la tenéis a la misma edad.
La menopausia es el cese definitivo de la función hormonal del ovario. Es normal a partir de los 40 años. Cuando aparece antes de los cuarenta se denomina menopausia precoz, y el enfoque es distinto.
Las recomendaciones de vida sana son comunes a todos los casos. Por el contrario, el consejo de tomar isoflavonas o tratamiento hormonal dependerá de la intensidad de los síntomas y la edad de comienzo de la menopausia.
Cambios en tus hábitos: vida sana
En la mayoría de vosotras, con solo cambiar los hábitos de vida, mejorar la alimentación y hacer ejercicio, es suficiente para amortiguar la pérdida de hormonas al entrar en la menopausia:
Haz ejercicio de forma regular
El ejercicio físico moderado aumenta tu tono muscular, mantiene calcificados tus huesos, disminuye tu peso o amortigua el incremento propio del inicio de la menopausia, y te ayudará en el insomnio, cansancio y cambios de humor tan típicos de este periodo de tu vida.
Mejorar la dieta:
No se trata de tomar las recomendaciones como los tópicos que siempre usamos. Se trata realmente de cambiar tu vida. Por otro lado, no es sólo para evitar el aumento de peso, sino también para mejorar tus niveles de calcio, vitaminas, antioxidantes, etc.
- Aumentar los productos lácteos, ricos en calcio: leche desnatada, yogur o queso fresco.
- Disminuir en general la cantidad de calorías de tu dieta.
- Disminuir las grasas de origen animal, embutidos, etc.
- Aumentar las grasas de origen vegetal como frutos secos, aceite de oliva, etc.
- Dieta rica en vegetales y fibras.
Vida sexual activa:
La vagina se atrofia por la falta de hormonas y la menor actividad sexual. Intenta mantener una sexualidad activa para evitar la atrofia. La sequedad vaginal puede mejorar utilizando lubricantes en las relaciones sexuales y alguna crema hormonal (consulta a tu ginecólogo). Con ello disminuirás las molestias o dispareunia durante el coito. El objetivo es seguir disfrutando de tu sexualidad y de tu relación de pareja.
Evitar hábitos tóxicos en exceso: tabaco, alcohol, café, etc. No se trata de dejar de tomar una copa de vino o el café por la mañana. Te hablo de evitar excesos.
Fitoestrógenos (isoflavonas)
En la naturaleza podemos encontrar compuestos parecidos a los estrógenos que se denominan fitoestrógenos y que tienen una débil acción estrogénica. Quiero dejarte claro que su potencia de acción es menor, pues sólo son «parecidos bioquímicamente» a los estrógenos.
Los fitoestrógenos más conocidos son las isoflavonas de soja. Su principal beneficio es reducir los sofocos. No los eliminan totalmente, pero pueden hacer que sean más soportables. Por tanto, además de los cambios en tus hábitos de vida vistos anteriormente, si tienes sofocos insoportables, puedes probar a usar las isoflavonas de soja durante uno o dos años tras la menopausia. No existe una pauta común para todas las mujeres.
Su efecto no es instantáneo. Comenzarás a notar la mejoría tras unas 6-8 semanas de tratamiento. No tienen efectos secundarios importantes, salvo molestias gastrointestinales leves y en algunos casos.
Tratamientos hormonales sustitutivo
La base de los tratamientos hormonales en la menopausia es administrar las hormonas que deja de producir el ovario. Las administramos bien por vía oral, vaginal, o en parches.Los compuestos pueden llevar estrógenos o estrógenos y progesterona (o derivados).
El problema de usar unos u otros son sus efectos secundarios. El uso de estrógenos tras la menopausia aumenta claramente el riesgo de cáncer de útero. Por tanto, en mujeres que tienen útero, el tratamiento sustitutivo debe ser a base de compuestos de estrógenos y progesterona.
El mayor beneficio del uso de la terapia hormonal sustitutiva es la reducción de los sofocos, mejora de la atrofia vaginal y reducción de la frecuencia de fracturas (disminuyen la osteoporosis). Disminuye el riesgo de cáncer de colon. Estos beneficios desaparecen al dejar de tomar el tratamiento.